El plástico que ya hemos generado no desaparecerá hasta dentro de más de 200 años. Por este motivo, todas las iniciativas para reducir el consumo del plástico y buscarle una segunda vida son necesarias y cruciales en el entorno actual.
Una empresa española, Sloppy Tunas, ha apostado por un concepto directo de reutilización: 7 botellas de plástico = 1 bañador. ¡sencillo!
Así nació esta marca enfocada en crear ropa de alta calidad con materiales reciclados y producido íntegramente en la península ibérica, de la mano de unos amantes del mar que pretenden “dar un cambio radical a la manera en la que consumimos y inspirar a más gente a hacer lo mismo”.
Un ejemplo a seguir…